En los inquietos años de la Roma de Claudio, las fronteras del Imperio se ven castigadas por los bárbaros, y un culto proscrito comienza a socavar los cimientos del panteón romano. Pero incluso esas fuerzas irresistibles empequeñecen ante el amor y el rencor que empujan a Décimo Valerio, “optio” de la Legión en Germania, a regresar a su Valentia natal para rendir cuentas ante su padre y guardar luto por su madre. Allí encontrará una ciudad envuelta en la corrupción, y un tortuoso camino que le ha de llevar a cruzar la inquieta Hispania en busca del gladius de su padre, por cuya hoja un bárbaro íbero se convirtió en un hijo
de Roma.
«Esta noche, forjaré de nuevo una espada con este hierro, y defenderé esta tierra como si fuera mi propio hogar. Y daré la vida por ella si es necesario.»